Argentina no pudo con el fantasma de Brasil en Maracaibo, y cayó en la final de la Copa América por 3 a 0. La goleada del conjunto de Dunga, permitió que la verdeamarela conserve su titulo una ves más; y que los del Coco se queden con las ganas. Robinho, que hasta esta instancia había sido la gran figura de un equipo que no jugaba bien, no apareció; pero Brasil se arregló con los goles de Baptista y Alves, sumado a las dudas defensivas de la Argentina, cuyo resultado fue un gol en propia meta de Ayala.
Los dos equipos salían a la cancha en iguales condiciones, y la selección local con un claro favoritismo debido a las grandes actuaciones que venía acumulando a lo largo de la copa. Brasil, hasta hoy, se mostraba con muchas debilidades, errores, y sin ese buen manejo del balo, tan típico en este equipo; exceptuando al delantero del Real Madrid. Los de Dunga ganaban desde los vestuarios, porque a minutos de sonar el pitido inicial, Julio Baptista abría el marcador con un fuerte remate al arco, que dejó sin reacción al Pato Abbondanzieri.
Julio Baptista festeja el primero.-
Los pentacampeones manejaban la pelota, y presionaban a un seleccionado que no daba respuestas, mas allá de algunos intentos fallidos de Leonel Messi. Los de Dunga ampliarían su ventaja con una jugada entre Maicon y el ingresado Daniel Alves, por Elano, que terminaría con un gol en contra del "Ratón" Ayala, en gran parte error del arquero local, que no le habló . La única clara de Argentina fue a través de un desborde de Messi, quien tiro un centro al área grande, para que Verón la baje y Riquelme defina fuerte y al ángulo, pero lamentablemente la pelota dio en el palo. No hubo más de el conjunto local en la primera parte, debido a que no encontraban la manera de contrarrestar el planteo inteligente de los brasileños.
Ayala lamenta su gol en contra.-
La segunda parte no iba a ser muy distinta. Las subidas al ataque de Maicon, y la fuerza de Baptista seguían complicando al conjunto argentino. Riquelme no aparecía, Messi no encontraba a alguien con quien descargar, Tevez que se tiraba todo el tiempo buscando una falta y Mascherano que no le alcanzaban las piernas para marcar a los rivales que atacaban, y que superaban a la defensa balnca y celeste. Basile sacó a Cambiasso y metió a Aimar, buscando dominar la pelota; objetivo que en ningún momento se consiguió. Ni siquiera con el ingreso de "Lucho" González por Verón pocos minutos después. Brasil, por su parte seguía jugando de memoria, generando jugadas peligrosas por los costados; para así evitar la marca de la figura de la selección en este campeonato, Javier Mascherano. Alves tuvo su chance y no la desperdició, definiendo cruzado tras una jugada fenomenal del Scratch; y el Pato que se dormía en la salida. Los del Coco intentaban desde las pelotas paradas, pero lo único que encontraban era un frentazo del defensor brasileño, Alex. El final se acercaba y la decepción Argentina aumentaba. Carlos Amarilla marcaba el final del encuentro, y las banderas celestes y blancas, que adornaban el Pachencho Romero se escondían.
El pato ve como entra la pelota.-
El buen juego que se había tenido en los partidos anteriores ya no servía. Ya es un dicho que "con Brasil nunca se sabe"; porque de empezar perdiendo lograron quedarse con la copa. Siempre son candidatos, por menos figuras que tengan. Hoy la Argentina no tuvo claridad, no encontró su juego y fue aprisionado por el planteo del equipo Brasileño. Se ganaron muchos partidos, pero no el decisivo. Se jugó bien, pero no lo suficiente. Por eso, y por otras cosas, la selección nacional salió segunda.
El equipo se retira con la manos vacias.-
Los dos equipos salían a la cancha en iguales condiciones, y la selección local con un claro favoritismo debido a las grandes actuaciones que venía acumulando a lo largo de la copa. Brasil, hasta hoy, se mostraba con muchas debilidades, errores, y sin ese buen manejo del balo, tan típico en este equipo; exceptuando al delantero del Real Madrid. Los de Dunga ganaban desde los vestuarios, porque a minutos de sonar el pitido inicial, Julio Baptista abría el marcador con un fuerte remate al arco, que dejó sin reacción al Pato Abbondanzieri.
Julio Baptista festeja el primero.-
Ayala lamenta su gol en contra.-
El pato ve como entra la pelota.-
El equipo se retira con la manos vacias.-
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